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¿Qué es la ashwagandha?

 
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La ashwagandha es un pequeño arbusto de hoja perenne que crece en la India, Oriente Medio y partes de África.

Su nombre botánico es Withania somnífera, siendo sus raíces la parte oficinal, es decir, la que se emplea para su consumo y los withanólidos su principio activo o ingrediente químico.

La podemos encontrar en el mercado en forma de polvo o como componente de algunos suplementos dietéticos utilizados para mejorar el sueño o tratar el estrés.


Propiedades de la ashwagandha

Los estudios que se han realizado sobre esta planta consideran que la ashwagandha es un adaptógeno. Este término utilizado en la fitoterapia significa que se atribuye a esta sustancia la propiedad de ayudar al cuerpo a responder al estrés mental y físico y restaurar la funcionalidad orgánica y emocional normales. De hecho, es el suplemento con mayor impacto y evidencia para reducir el cortisol, que es esa hormona del estrés tan importante para nuestra salud.

La larga lista de propiedades que se le atribuyen a la ashwagandha incluye:

  • Reducción de los síntomas de estrés que pueden conducir a la ansiedad y la depresión
  • Ayuda a las personas con insomnio a dormir
  • Aumento de la masa muscular, la fuerza, la resistencia y la energía
  • Reducción de la inflamación (por ejemplo, para ayudar a prevenir el daño del cartílago causado por la artrosis)
  • Reducción de las concentraciones de colesterol y triglicéridos
  • Bajada de la presión arterial
  • Mejora de la función cerebral (incluida la memoria)
  • Reducción de las concentraciones de azúcar en sangre en personas con diabetes
  • Destrucción de las células cancerosas
  • Reducción del aumento de peso asociado al cortisol


Beneficios de la ashwagandha

Estudios realizados en laboratorios han demostrado que la ashwagandha reduce la inflamación y relaja el sistema nervioso central, haciendo de esta sustancia un antiinflamatorio y antioxidante ideal.

Entre los beneficios más destacables y demostrados está el poder:

  • Ayudar a reducir el estrés, la ansiedad y la fatiga
  • Mejorar la calidad del sueño en personas con insomnio
  • Mejorar la función cerebral y ayudar a aliviar la ansiedad


¿Qué interacciones farmacológicas se producen con la ashwagandha?

Sabiendo sus propiedades y beneficios, se puede deducir su interacción con ciertos fármacos potenciando su acción. Es el caso de:

  • Hipoglucemiantes, medicamentos empleados para bajar el azúcar
  • Antihipertensivos, medicamentos empleados para bajar la tensión arterial
  • Inmunosupresores, medicamentos que disminuyen el sistema inmune, ya que la ashwagandha aumenta la respuesta del sistema inmune
  • La ashwagandha puede provocar somnolencia. Por lo tanto, la combinación de fármacos sedantes-hipnóticos (utilizados para ayudar a conciliar el sueño) con ashwagandha podría provocar una somnolencia excesiva. Es el caso de los ansiolíticos tipo benzodiacepinas
  • La ashwagandha puede aumentar las concentraciones de hormona tiroidea, ojo las personas que tengan hipotiroidismo y estén medicadas.


Resumiendo, se aconseja tomar ASHWAGANDHA en caso de insomnio debido a estrés junto a la melatonina, en épocas de estrés para mejorar la memoria (como es el caso de los exámenes) y como recuperador en la práctica de deporte por su acción antioxidante.

No deben tomarla mujeres embrazadas y lactantes, ya que no se ha realizado ningún ensayo en ellas, personas en tratamiento con ansiolíticos, hipoglucemiantes, antihipertensivos, inmunosupresores y tiroides.

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