Qué hacer ante quemaduras solares, picaduras e irritaciones cutáneas en verano

La piel es nuestra primera barrera defensiva, pero también es una de las más expuestas durante el verano. El sol, el sudor, el roce de la ropa, el contacto con insectos o el cloro de la piscina pueden provocar lesiones cutáneas leves pero molestas.

Como farmacéutica, te explico cómo identificar y tratar adecuadamente las quemaduras solares, las picaduras de insectos y las escoceduras o irritaciones cutáneas, con consejos prácticos para aliviar los síntomas y prevenir complicaciones.

1. Quemaduras solares: cómo actuar desde el primer momento

Una quemadura solar es una inflamación de la piel provocada por la radiación ultravioleta (UV), especialmente cuando no se ha utilizado fotoprotección adecuada.

🛑 Signos y síntomas:

• Enrojecimiento (eritema) en las zonas expuestas
• Sensación de calor, ardor o escozor
• Piel sensible al tacto
• En casos más graves: aparición de ampollas o fiebre

✅ Qué hacer ante una quemadura solar:

1. Refresca la zona con agua fría durante varios minutos (no hielo directo).
2. No frotes ni uses aceites: estos pueden retener el calor.
3. Aplica un aftersun calmante con aloe vera, caléndula o pantenol.
4. Evita volver a exponerte al sol hasta que la piel se recupere.
5. Hidrátate bien: la piel quemada pierde agua y electrolitos.

📝 Ejemplo práctico:
Si después de una jornada en la playa te arde la espalda al rozarla con la camiseta, probablemente tengas una quemadura de primer grado. Aplica gel de aloe vera varias veces al día y evita camisetas ajustadas.

🚨 Cuándo consultar al médico:

• Ampollas grandes o múltiples
• Fiebre o escalofríos
• Dolor intenso o piel de aspecto purpúreo
• Deshidratación o mareos

2. Picaduras de insectos: qué aplicar según el caso

Las picaduras son reacciones cutáneas producidas por el veneno, la saliva o el contacto mecánico de insectos como mosquitos, abejas, avispas o tábanos.

🤕 Síntomas típicos:

• Enrojecimiento localizado
• Picor o dolor leve
• Hinchazón en la zona de la picadura

✅ Cómo tratarlas:

1. Limpia con agua y jabón.
2. Aplica frío local (una bolsa de hielo envuelta en tela).
3. Usa una crema calmante: puede ser con calamina, amoniaco o corticoides suaves.
4. Toma un antihistamínico oral si el picor es muy molesto o la hinchazón se extiende.

📝 Ejemplo práctico:
Si te pica un mosquito en el tobillo y te genera mucho picor, aplica una crema con amoníaco o hidrocortisona suave para reducir la reacción. Si eres alérgica, lleva siempre un antihistamínico oral en tu botiquín.

🚨 Signos de alerta:

• Dificultad para respirar, hinchazón de lengua o labios (anafilaxia)
• Reacción muy extensa (más de 10 cm)
• Supuración, dolor intenso o fiebre (signo de infección)

3. Escoceduras, irritaciones y rozaduras: cómo prevenir y aliviar

Las escoceduras cutáneas aparecen por fricción, humedad o sudor. Son muy comunes en muslos, axilas, ingles, zonas bajo el pecho o en bebés (área del pañal).

👶 Poblaciones de riesgo:

• Bebés y niños pequeños
• Personas con sobrepeso
• Deportistas o caminantes
• Pieles sensibles o con dermatitis

✅ Tratamiento:

1. Limpia con agua templada y jabón suave.
2. Seca bien la zona (sin frotar).
3. Aplica una crema con óxido de zinc o vaselina para proteger.
4. En casos más inflamados, se puede usar una crema con corticoide suave bajo indicación profesional.

📝 Ejemplo práctico:
Si después de una caminata larga tienes irritación entre los muslos, aplica una capa generosa de crema protectora y cambia a ropa de algodón holgada.

Prevención: clave para evitar molestias veraniegas

• Usa protector solar FPS 50+ y reaplícalo cada 2 horas.

• Evita el sol entre las 12 y 16 h.

• Vístete con ropa ligera y transpirable.

• Lleva repelente de insectos y afterbite.

• Sécate bien después del baño y cambia el bañador húmedo.

Las lesiones cutáneas del verano pueden parecer leves, pero si no se tratan bien pueden empeorar. Con un enfoque preventivo, productos adecuados y una buena actuación inicial, puedes evitar complicaciones y seguir disfrutando del verano sin contratiempos.

En caso de duda, tu farmacéutica de confianza puede orientarte sobre el mejor tratamiento para cada tipo de piel y situación.